Generalmente, cuando de edredones nórdicos se trata, nos centramos casi exclusivamente en su relleno y apenas le dedicamos atención al tejido exterior del nórdico.
Evidentemente, el relleno tiene una importancia fundamental y el hecho de que esté compuesto de plumas o de fibras sintéticas va a determinar las características del mismo, sus pros y sus contras.
Pero no es menos cierto que el tejido exterior de un nórdico también va a desempeñar una importante labor a la hora de proporcionarnos el confort y la comodidad que buscamos.
El tejido exterior de un nórdico también tiene mucha importancia a la hora de comprar un edredón.
Básicamente podemos establecer una primera y clara distinción entre dos tipos de tejidos: aquéllos que tienen un origen natural y lo que son de fibras sintéticas.
Tejido exterior natural
En esta categoría de tejidos exteriores en los rellenos nórdicos, el algodón es el más importante de todos. Su uso está ampliamente extendido en todo lo que se considera ropa de cama: sábanas, fundas de almohadas, bajeras, colchas… y, por supuesto, en el tejido de los edredones.
La razón de un uso tan extendido la podemos encontrar en las múltiples ventajas que aporta. Vamos a ver algunas de ellas:
- Es un tejido natural y ecológico.
- Se puede lavar a altas temperaturas, lo que facilita su limpieza.
- Seca muy rápido.
- Es una fibra muy transpirable. Ello hace que el aire pueda circular con facilidad y se permita la correcta aireación del relleno nórdico y se evite la proliferación de hongos, bacterias o ácaros.
- Proporciona sensación de frescor
- Al no estar tratado con productos químicos y ser una fibra totalmente natural, es hipoalergénico y está recomendado especialmente para las personas que sufren de alergias. También es aconsejado para pieles sensibles o que se irriten fácilmente.
- Tiene un buen poder de absorción de la humedad. Ello, unido a su capacidad para transpirar, favorece que el durmiente se sienta cómodo y no se sude.
- Es muy ligero y cómodo.
- Es bastante duradero y resistente.
Como ejemplo de uno de nuestros edredones con tejido exterior de algodón podemos citar el relleno nórdico Platinum Icelands con plumón de oca blanca. Este nórdico tiene un tejido exterior de algodón trenzado que le aporta una textura y una suavidad parecida a la de la seda y, además, evita que las plumas y plumones puedan salirse del relleno a través de dicho tejido.
Tejido exterior sintético de los nórdicos
Dentro del grupo de los tejidos sintéticos, la fibra de poliéster viene siendo usada desde hace más de cincuenta años. De hecho, la forma en la que ésta ha venido utilizándose desde entonces se ha ido modificando al ser combinada con otras fibras. El objetivo de dicha mezcla ha sido el de evitar los inconvenientes que el poliéster por sí solo tiene.
Entre sus ventajas podemos destacar:
- Es una fibra muy económica, lo que permite abaratar los costes del producto.
- Tiene mucha resistencia, tanto al roce como a la tracción.
- Es muy duradero.
- Es mucho más resistente que el algodón a las arrugas.
- No encoge.
Otros tejidos sintéticos -como la viscosa- también han tenido cabida en la fabricación de tejidos para rellenos nórdicos. Un ejemplo podría ser el nórdico termorregulador de Pikolin Home Outlast fibra de 200 gramos. El tejido exterior de viscosa aporta un tacto muy suave y agradable.
Pero el mundo del descanso no ha estado al margen de las innovaciones y los avances tecnológicos. Y una prueba de ello son los nuevos tejidos que se han introducido en la fabricación de los diversos elementos y la ropa de cama.
Esto sucede, por ejemplo, con la microfibra: una mezcla de poliéster y nylon que presenta múltiples ventajas y aplicaciones frente a las que posee el poliéster por sí solo. Así, la microfibra tiene el doble de capacidad de absorción de la que presenta el algodón, que ya de por sí es bastante alta. Es un tejido altamente transpirable y evacua el sudor con mucha facilidad. Su suavidad al tacto hace que los rellenos nórdicos den una agradable sensación de comodidad y confort.
Pero además, la microfibra utilizada en los tejidos exteriores de los nórdicos tiene una gran resistencia. Se puede lavar innumerables veces y a altas temperaturas sin que pierda sus características. Los tejidos fabricados con ella no se deforman ni se arrugan y son especialmente apropiados para la fabricación de ropa de cama para el frío como los edredones nórdicos.
Un ejemplo de edredón nórdico que usa la microfibra para la confección de su tejido exterior podría ser el Nórdico Nordiletto de Mash: un relleno nórdico con fibra hueca siliconada y un tejido exterior 100% microfibra.