Flex nos ha vuelto a sorprender con su nueva campaña: «Flex Asexuales», donde busca dar visibilidad a todas aquellas personas que no sienten interés por el sexo o atracción sexual hacia otros.
En esta campaña Flex nos invita, en la cama, a hacer o no hacer lo que nos de la gana porque «La noche es nuestra».
Este anuncio ha provocado una gran respuesta en este colectivo que hasta ahora nunca se había visto reflejado públicamente.
Según un estudio de la Universidad Canadiense Brock, el 1% de la población mundial (70 millones de personas) son asexuales, es decir que no sienten deseo por otras personas.
Esta campaña presenta testimonios reales de personas asexuales que han decidido contar su experiencia.
Sobre las campañas de Flex
Flex es una multinacional española líder en el descanso desde hace más de 100 años. Sus principales características son la calidad e innovación, adaptándose en cada momento a las necesidades de sus clientes.
Desde su creación en 1912, las campañas de Flex han buscado la proximidad al consumidor y la mejora constante de sus productos, esto ha dado como resultado que más de 20 millones de personas utilicen colchones Flex.
Es una empresa que cuenta con un gran reconocimiento y una importante posición en el sector.
Flex ya ha creado en otras ocasiones campañas polémicas cargadas de mensaje y donde buscan la complicidad con el cliente:
1.- En 2009 lanzó la campaña «Tu cama. El lugar más importante del mundo» donde se mostraba un parto en casa.
2.- En 2010 lanzó la campaña «Renueva tus sueños» donde en plena crisis impulsaba a las personas a soñar con un mundo mejor y agarrarse a sus sueños para no perder el optimismo y la alegría de vivir.
3.- En 2011 lanzó la campaña «40 días en la cama» donde una pareja está 40 días en la cama para revindicar el movimiento Slow que busca frenar la vida acelerada de nuestra sociedad y hacer las cosas más lentas, de forma más relajada y tranquila, disfrutando de lo bueno de la vida.
4.- En 2012 lanzó la campaña «Arriba Contador 110» protagonizada por el ciclista Alberto Contador después de que le arrebataran el título del Tour de Francia 2010 por un fraudulento positivo en Clembuterol (posteriormente se confirmó que venía de reses infectadas) y por el que estuvo suspendido durante 2 años por sanción.