Dormir bien en pareja puede llegar a resultar bastante complicado y es que conciliar la rutina del sueño de los dos es muy difícil. Cada persona está acostumbrada a una serie de hábitos y comodidades individuales, las cuales debe adaptar ahora a una nueva persona.
Es momento de compartir y de pensar en dos, por eso hay que prestar atención a las complicaciones que pueden surgir de compartir cama.
Ronquidos incesantes
Uno de los principales problemas que surgen cuando se duerme en pareja es el tema de los ronquidos. Existe la opción de utilizar tapones para los oídos o las típicas bandas de la nariz para el roncador. Sin embargo, este asunto también puede solucionarse empleando productos de descanso adecuados. Y es que quizás no estemos empleando los recursos necesarios para tener un sueño correcto.
Por ejemplo, el fabricante español Pikolin Home ha ideado una almohada anti-ronquidos. Este modelo cuenta con una función muy práctica para estos casos. Se encarga de alinear el cuello de manera adecuado, proporcionando una buena posición para disminuir la obstrucción de las fosas nasales y minimizar los ronquidos. En el caso de que los ronquidos persistan, lo mejor es consultar a un especialista lo antes posible.
Del mismo modo, para mejorar la calidad del sueño y evitar complicaciones tales como los ronquidos, también se debe escoger otros elementos de descanso apropiados.
Continuos movimientos en la cama
Otra de las dificultades al dormir con otra persona es el espacio. Éste debe adaptarse a las necesidades y características de cada pareja. Igualmente, si tu pareja no para de moverse en la cama, lo mejor es comprar una cama amplia.
Los colchones de muelles ensacados son una apuesta segura, pues proporcionan independencia de lechos, es decir, se respeta las zonas diferentes de los durmientes. Además, son los colchones que más se adaptan al cuerpo ya que no hay ninguna zona que quede sin apoyo, manteniendo la correcta alineación de la espalda, por lo cual la persona no se mueve tanto a lo largo de la noche al estar cómoda.
Asimismo, existe un sistema innovador, conocido como Normablock, que logra que los movimientos de uno no afecten en nada al otro durmiente. La unión de sus filas de muelles ofrece una mayor estabilidad al núcleo y, de esta forma, se aíslan los movimientos de cada persona de la cama. Los muelles se encuentran unidos unos a otros por unas espirales que recorren toda la superficie del colchón, lo cual evita que las distintas presiones se transmitan de un lado a otro del colchón. Así, se crean zonas de descanso completamente independientes.
Diferentes temperaturas en la pareja
La temperatura es otro de los posibles conflictos entre parejas, pues no todos tenemos igual sensación ante el calor o el frío y hay personas que necesitan más abrigo que otras en una misma situación. En ese sentido, es muy complicado por no decir imposible sincronizar la temperatura a la hora de dormir.
Sin embargo, al igual que existen multitud de productos para dar solución a los problemas anteriormente mencionados, también hay diferentes opciones para este tema. Una de ellas consiste en el tejido Outlast, el cual está presente en una amplia gama de productos. Este sistema regula tanto la temperatura como el grado de humedad, lo cual permite un mejor descanso. Reduce los picos de temperatura corporal que pueden dan lugar a diferentes alteraciones en el sueño.
Se trata de una tecnología revolucionaria, que ofrece control sobre la temperatura corporal, absorbiendo el calor que el cuerpo genera y liberándolo cuando se produce un descenso de la temperatura del mismo.